La boda de mis amigos

Hace una semana recibi un correo que dificilmente podre olvidar. Mi querido amigo Juan Carlos tomo la decision de matrimoniarse con su novia, y lo hara de forma intempestiva (como es el) el dia 5 de agosto de este año tan raro para mi. Y pasara a la ya nutrida lista de amigos cercanos que se han aburrido de su vida de solteros para engrosar la angustiosa lista de casados. Enumeremos: Edmundo, Joseph, Dany (aunque despues hizo la del Jacko y se regreso con caminata lunar incluida), Jean Pierre, Nikolay, Cesitar, Manu y George que aunque no legalmente tambien estan en la misma mancha y ahora el Juanca. Perdonenme todos Uds. y mucho mas perdonenme sus dignisimas esposas/novias, pero la depresion me embarga. Una sensacion de desolacion invade mi pecho y me hace sentir mas solo de lo que normalmente me siento.

Y es que para un tipo como yo, que cada dia que pasa siente que no puede estar tranquilo si es que no esta con el mismo, es dificil entender las ideas y sensaciones que pasan por un varon para tomar tamaña decision. Muchas veces esgrimo mis argumentos (todos rebatibles entiendo) y termino siendo visto como el bicho raro, como el ogro, como el amigo a desechar (por parte del lado femenino de mis compañeros). ¿No pueden entender que se les va a extrañar? ¿No entienden que por mas que lo piensen y digan, NADA SERA LO MISMO?. Y lo peor de todo es su cara de felicidad, esa sensacion de que estan haciendo lo correcto (y lo mas probable es que sea cierto).

A mi modesta forma de entender esta vida (que cada vez entiendo menos, valgan verdades), el matrimonio es un tema de lo mas complejo. Tengo mas amigas cercanas que ya han pasado por estos trances pero ellas no me preocupan porque se que son felices. Pero mis amigos, a pesar de que entiendo que puedan serlo, me generan muchos pensamientos y sentimientos encontrados.

Creo que lo unico que me queda decirles a mis amigos es que les deseo la mayor felicidad del mundo, no por casarse, si no porque son eso, mis amigos. Y que espero entenderlos cuando yo tenga que pasar por esos trances. Y a ti Juancarlitos, el mayor de los abrazos y desearte la mas grande felicidad. Por lo demas, cuando se peleen con sus ñoris (como dice el resignado Jeanpi) acuerdense que en mi tienen a unos de los ultimos bastiones de la libertad (¿?), es decir, a un cojudo sin oficio ni beneficio que se jacta de estar soltero, cuando muy en el fondo los envidia de manera sana porque por fin entendieron que la mezquindad del hombre es una estupidez y siempre tiene que ir acompañada del mundo incomprensible que casi siempre resulta una mujer.