Señorita Laura

Hoy te escuchaba hablar y me senti muy orgulloso de ti. Por primera vez desde que tengo conocimiento de ti pude sentir congruencia y pude ver palabras gratas en tu boca. Despues de mas de 15 años de tortura escuche lo que queria escuchar: que pienses igual que yo.

Desde mi sillon veia como despotricabas contra mi pais, que gracias al cielo ya no consideras como tuyo; en mi sala pude sonreir al escucharte decir que no querias saber nada de Peru y que ni tus cenizas descansarian aqui. Gracias, muchas gracias.

Y es que debiste hacerlo hace mucho tiempo, pero la verdad no entiendes indirectas. Tanto reproche, tanto insulto, tanta carcel, tantas ganas de joderte no fueron suficientes para ti. Igual siempre volvias, putamare. Pero esta vez parece que no sera asi. Esta vez amenazas con quedarte en Mexico (mas lindo y querido que nunca porque nos libro de ti) y prometes que de Peru ni la tos (lagrimas brotan de mis ojos).

Ya era suficiente hace tiempo tia Manson, no te mediste, te aprovechaste, te zurraste en la necesidad, hiciste un circo peor que el romano y te escudaste en tu habilidad de lamer traseros grosos para obtener poder. No hay mal que dure cien años Laura, ni pais que te resista. Canta las mañanitas, come enchiladas y regala carritos...como serian....taqueros?? Manten a tu gaucho y alejalos de las tentaciones aztecas, hazlo cantar, consiguele una banda grupera y mandalo a cantar a la frontera a ver si lo chapan unos mareros y lo ponen como camote.

Y sobretodo hazme un favor: cumple tu promesa, NO REGRESES, no te necesitamos, quedate por alla, lo siento por Mexico pero asi es la vida. No vuelva señorita Laura, quiero que los extranjeros sepan que tengo dientes y que no voy solo a polladas a tonear, quiero que sepan tambien que no trampeamos en nuestras propias casas y que no manoseamos a los niños que esten al alcance de nuestras manos. Quiero que sepan que estamos muy contentos porque te quitaste, porque renunciaste a tu peruanidad, por evitarnos ver tu cacharro horrible.

Gracias tia por librarnos del mal, por librarnos de ti misma. Amen.