L.R.

Como el león Santillán dentro de tu cuarto aguardabas quizá el momento final
agazapado y con la pistola en la mano esperabas a ese enemigo desconocido
al que acecha, al que amenaza, al que jode
tenias tantas ganas de sacarle la mierda, de meterle la bala entre los ojos
paciencia cholo, ya llega...

Te llegaron al pincho los mayos y los octubres que faltaban y la sabrosa marinera
tú querías bailar con la más fea, para mostrarle, para enseñarle
tú querías quedarte con el pañuelo en la mano y con la flaca también
quizá pensaste, quizá, quizá no lo hiciste
poco a poco cholo, poco a poco...

Pero que miedo papa al darte cuenta de quién estaba afuera
muy parecido, igualito carajo, parecia mentira
pero ya estabas en el caballo, a la mierda, a montarlo
y nadie te pudo ganar más que tú mismo, eso dicen, eso dices
y si es así qué! que se vayan a la mierda todos...menos tú

Ahora bailas cholo, sin tocar el piso, volando, con concha
ahora miras y chupas tranquilo, cuidando, observando
desde hoy pasa un viento cálido y familiar que reconocen todos
sabemos que eres tú y nadie duda, que en nuestros corazones
nos morimos porque estés con nosotros