Walter

Yo soy aliancista, desde muy pequeño y cada día más. Por eso te escribo Walter, porque no te conocí pero compartimos un sentimiento juntos, y eso basta para sentirse abatido cuando me enteré lo que había pasado. Nada en este mundo, ni siquiera el querer tanto a un equipo de fútbol como lo quisiste tú y como lo quiero yo, puede ser motivo para esto, no vale tanto la pena, no lo vale la verdad. Por la culpa de unos estúpidos irracionales que seguramente estaban intoxicados, tú ya no estas con tu familia y no irás más a Matute a ver lo que tanto queremos. Por la culpa de unos pseudo hombres, hijos de las mil putas, ya no ves más la luz y eso compadre no se vale. Buscar culpables, castigar, vetar, encarcelar, eso es algo que se debe hacer pero que pasa a segundo plano. Lo más importante aquí es esperar que tu muerte no sea en vano. Debes de pasar del minuto de silencio que seguramente el sábado todos respetaremos en Matute por tí. Debes ser más que el recuerdo de tu familia y el amor que seguirá estando hacia ti de parte de ellos. Debes ser la razón por la cual tanta estupidez ya no este más entre nosotros.

No hay forma de devolverte la vida y eso no lo arregla ningún castigo. Ojala que desde el cielo puedas ayudar a tu familia y a tus amigos a pasar el trago amargo de que ya no estes. Ojala que puedas iluminar a tanto imbécil. Ojala que por tu causa ya nadie más cierre los ojos de la manera que tú lo hiciste. Ojala Walter que puedas descansar en paz. A nosotros estos días nos está costando.